Autor: Cassandra Clare.
Sinopsis: Emma Carstairs ha descubierto que sus sentimientos por Julian no solo están prohibidos, sino que incluso pueden tener consecuencias destructivas a gran escala. Debe alejarse de él, tiene que enfriar sus sentimientos. Pero ¿cómo hacerlo justo en el momento en que Julian la necesita más que nunca? Su única esperanza es el Libro Negro de los Muertos, un compendio de hechizos con un terrible poder. Todos lo quieren, pero solo los Blackthorn pueden encontrarlo. Inmersos en una aventura colmada de magia y engaños, en su camino se cruzará el poderoso Señor de las Sombras [...] (Extracto de la contraportada de mi ejemplar).
¿Qué les puedo decir? Los Cazadores de Sombras han andado por las Seudo-reseñas casi desde sus inicios. No lo hubiera imaginado en aquella lejana (y única) FIL Guadalajara a la que asistí, cuando compré el primer ejemplar de los libros de Clare que llegó a México en español (más porque tardé lo mío en realmente leerlo), pero aquí estamos, años después, todavía esperando con ganas las novedades que salen, aunque ahora soy más crítica con las decisiones de Destino respecto a esa saga... pero eso no es lo que toca acá, así que lo dejaré por ahora.
Emma Carstairs ha tenido cierto sentimiento de cierre respecto al asesinato de sus padres, que antes la tuviera tan obsesionada, pero eso le deja un nuevo conflicto: lo que sea que esté pasando con su parabatai, Julian Blackthorn. Y no solo con él: debido a los acontecimientos finales de Lady Mignight, ahora hay más de una cosa de la que ella y los Blackthorn deben preocuparse, así como sus allegados. Se nos presentan algunos personajes muy particulares que llegan al Instituto de Los Ángeles con el fin de investigar sí, el "pequeño lío" que parece haber sucedido por aquellos lares, pero no todos son agradables ni humildes, y no solo porque se presenten como Centuriones, un tipo de cazadores de sombras que ha resurgido, en parte, debido a la Paz Fría. Solo con eso, Emma intuye que ella y Julian tienen mucho más en juego de lo que parece a simple vista y que todos los suyos pondrán su granito de arena, pero ¿eso será suficiente?
Al igual que con Lady Midnight, El Señor de las Sombras tiene un grosor considerable, aunque en su caso no me sorprendió tanto, porque pensé "es el centro de una trilogía, seguro me va a lanzar un montón de trama". Y sí, así fue: no solamente se dedicó a ir enlazando, al principio, el libro anterior con este, sino que nos fue preparando para lo que sus páginas iban tejiendo poco a poco como no uno, sino los muchos meollos del asunto, presentando grietas tanto dentro como fuera de los cazadores de sombras. Se vuelve difícil no solo para los Blackthorn y Emma, sino para nosotros como lectores, el descifrar en quién o quiénes hay que confiar para que las cosas salgan bien o, por el contrario, a quién vigilar porque seguramente meterá la pata hasta el fondo. Lo bueno (más o menos), es que casi siempre acertarás en quién dará las puñaladas por la espalda, por más que duela.
Todos debemos agradecer a Clare que se tomara la molestia no solo de presentarnos a sus personajes, tanto buenos como malos, sino que va entretejiendo los sucesos de las diversas partes de su elenco para darnos el panorama completo cuando realmente importa. No voy a mentir y decir que será una historia fácil de seguir, porque no lo es, los que seguimos esta saga desde hace un tiempo podemos confirmarlo. Es parte de su encanto, creo yo, y por eso seguimos al pie del cañón cada que sale algo nuevo (es algo que no puedo evitar repetir en cada seudo-reseña de un libro de esta saga). Queremos estar atentos a cada escena que nos parezca trascendental, a cada diálogo que los personajes sueltan de improviso, confiando en que allí estará la clave para solucionar alguno de los problemas que Emma y compañía tengan, pero bueno, como también sabrán, con Clare las cosas no son tan simples y mejor hay que estar preparados para seguir teniendo esa curiosa relación amor-odio con sus libros, sobre todo si son este, que como mencioné antes, es "centro de una trilogía" y por lo tanto, su final tiene un clarísimo aire de "continuará y con ello, seguiré partiéndote el corazón".
Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.
(Leído en 2017)
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