Título: Asesinato en el Orient Express (en el idioma original, Murder on the Orient Express).
Autor: Agatha Christie.
Sinopsis: Un grupo de viajeros se ve atrapado en el Orient Express en medio de una tormenta de nieve. Entre ellos pronto se descubre un cadáver. El asesino está entre los presentes. Al detective más famoso de la historia le corresponde averiguar quién ha cometido el crimen. (De la contraportada de mi ejemplar).
Editorial de mi ejemplar: Editorial Planeta Mexicana S. A. de C. V. (a través de Booket).
¿Qué les puedo decir? Me arriesgo a que alguien me linche, pero lo soltaré: nunca había leído a Agatha Christie antes. Jamás. Obviamente, por la cultura popular, sabía quién era y las referencias a algunas de sus obras, pero nada de leerla. Así pues, con la última adaptación cinematográfica de Asesinato en el Orient Express y la salida de una colección de bolsillo de varias de sus obras, decidí que era el momento de lanzarse de cabeza, así que incluí este título en el maratón de lectura del Foro de los Black de 2018. Alerta de spoiler: fue uno de los que sí terminé en el periodo del mencionado maratón (baila la conga del puro gusto).
Es muy conocido Orient Express, un tren que te lleva gente por la mitad de Europa (más o menos, parece que tenía diversas rutas), por lo que no es de extrañar que también coincidan allí todo tipo de viajeros. Hércules Poirot, un detective bastante reconocido en ciertos círculos, es a quien se ve abordar en esta ocasión, debido a que se le requiere en casa con urgencia desde donde está. Casi de recién llegado al tren, se topa con alguien a quien viera recientemente, y que además quiere contratarlo porque dice correr peligro y quiere averiguar la identidad de la posible amenaza. Pero Poirot, por instinto o por convicción (y por algo en su cara, según dice), rechaza la oferta del tipo. Poco después, durante una parada forzosa del tren por un atasco causado por una tormenta de nieve, el fulano aparece muerto y en una escena del crimen bastante particular. Le piden a Poirot que ayude a resolver el misterio, y conforme indaga, sale a la luz que el muerto no era una blanca paloma y por lo tanto, más de un compañero de viaje ´lo quería tieso. ¿A qué resolución llegará Poirot en un escenario como este?
Los misterios me gustan, lo admito. A veces incluso los escribo, pero claro, una cosa es armar personalmente el misterio y otra muy diferente el leer uno que otra persona escribió: en el primer caso, sabes por qué pasa cada cosa y por qué se va a resolver como lo tienes previsto; en el segundo caso, debes reunir todas las pistas que se te presenten y ver si aciertas a lo que el autor en turno declaró como solución. Creo que allí radica gran parte del atractivo de las novelas de misterio y/o policíacas: que el lector quiere saber si es tan listo como para saber quién es el culpable antes que el autor, a través de su historia, se lo tenga que explicar.
Christie ha sido conocida como una pionera y si sus novelas han seguido en el gusto del público, debía ser por algo. Yo no acababa de comprenderlo, hasta que leí algo suyo y comprendí que, en su época, una historia como Asesinato en el Orient Express habrá tenido a más de uno al filo del asiento, además de preguntarse acerca de la solución del caso y qué harán con este. Como suele pasar en esta clase de historias, hasta el muerto tiene algo qué aportar, por más que ya no interactúe con ningún otro personaje, y eso es extraordinario en sí mismo.
No queda mucho por decir, dado que es una de las novelas más conocidas de Christie, si acaso el recomendar ir al libro si es que solo han visto una de sus adaptaciones (como la última que llegó al cine, esa que como de costumbre, vino a los cines mexicanos y se fue... pero no fui a ver). Ya saben, siempre estaré a favor de conocer ambas versiones para así, elegir una favorita con conocimiento de causa.
Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.
(Leído en 2018)
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