jueves, 27 de noviembre de 2014

Describiendo a... (e-XXXIV)

Sí, estas portadas no son lo más
genial, pero al menos encajan (?)
Título: Sin cambios (en el idioma original, Changeless).

Autor: Gail Carriger.

Sinopsis: Alexia Maccon, recientemente convertida en lady Woosley, se despierta a media tarde y descubre que su marido, en lugar de dormir plácidamente como todo hombre lobo que se precie, está inmerso en una discusión a pleno pulmón de la que acto seguido, desaparece sin siquiera despedirse, dejando a la pobre Alexia sola con el regimiento de soldados sobrenaturales que acaba de acampar frente a su casa, una plétora de fantasmas y una más que airada reina Victoria. [...] (Extracto de la introducción).

Formato: Digital (epub).

¿Qué les puedo decir? Después de los desfiguros de Alexia en Sin Alma, pensé que la autora debía tener algo bueno en la siguiente parte para sorprenderme. Y lo tuvo, de varias maneras, aunque las palmas se lo lleva el final. Pero no me adelantaré, mejor vayamos de lleno a la historia.

Alexia Tarabotti, contra todo pronóstico de las damas refinadas de Londres, se ha casado, nada menos que con lord Maccon, un hombre lobo. Parece que todo va bien entre ellos hasta una tarde que despierta  (debido a los hábitos nocturnos de su flamante marido) oyendo discusiones en el dormitorio, después de lo cual lord Maccon sale corriendo sin dar explicaciones. A partir de allí, Alexia se ve frente a imprevistos que jamás habría imaginado, desde un regimiento de licántropos que llega a acampar al frente del castillo de Woosley hasta una epidemia de sobrenaturales sin poderes de lo más misteriosa. Por lo tanto, Alexia no solo se pone a buscar respuestas al extraño comportamiento de su marido, sino a otras interrogantes que van surgiendo en el transcurso de la historia.

Debo admitir, como en el libro primero, que Alexia no es para nada como se supone que debe, más en la época en la que vive. Es práctica al por mayor, y al mismo tiempo, una observante fiel de las formas, al menos todo lo que puede, considerando que ha estrechado lazos con el mundo sobrenatural más de lo que la gente común cree (puesto que su condición de "preternatural" o "sin alma" no es de dominio público). Así las cosas, nuestra protagonista deberá enfrentar más que un marido celoso, una manada insubordinada, una amiga histérica y un coqueteo de la fuente más inesperada. Por nombrar algunos detalles.

Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.

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