Nombre: Cecilia Tallis.
Descripción: Guapa, delgada, impaciente. Una de las cosas que más anhela es dejar de ser la "mamá" en su casa, debido a las constantes migrañas de su madre. Es inteligente, o al menos eso creía, pero en la universidad no le va tan bien como creía. Conforme la novela avanza, se aferra a su profesión y a un amor ligeramente tormentoso para seguir con su vida.
Consigna que cumple: #2, Un personaje que se dé un baño de inmersión/entre en una piscina/jacuzzi (cualquier momento en el que flote en un espejo de agua artificial, digamos, por más pequeño que sea).
¿Por qué cumple esta consigna? Debido a un accidente, Cecilia se ve en la "necesidad" de entrar a la fuente de los terrenos de su casa, aunque parte de ello tiene relación con la compañía del momento.
[…] Ella supo de inmediato lo que se proponía. Intolerable. Él había ido a la casa y se había quitado los zapatos y los calcetines… pues bien, ahora vería. Agitando los pies se despojó de las sandalias, se desabotonó la blusa y se la quitó, se desabrochó la falda, se la bajó y se encaminó hacia el muro de la pileta. Él permaneció con las manos en jarras y la observó mientras ella se introducía en el agua en ropa interior. Rechazar su ayuda, toda posibilidad de que se redimiera, era el castigo de Robbie. Contuvo la respiración, se sumergió y sus cabellos quedaron desparramados sobre la superficie. Ahogarse era la punición de Robbie.
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