miércoles, 30 de marzo de 2016

Describiendo a... (CXLII)

Título: Crónica de una muerte anunciada.

Autor: Gabriel García Márquez.

Sinopsis: [...] Basada en un suceso real, la reconstrucción literaria, laberíntica y polifónica del ineluctable y brutal asesinato de un hombre en una remota población fluvial caribeña significa la apuesta más arriesgada de Gabriel García Márquez hacia una novela total. Microcosmos trágico, explora el ancestral atavismo de la virgen en la cultura hispánica, donde se entretejen las ideas de la moral pública, el honor familiar y la conciencia de clase, al tiempo que elabora una magistral vuelta de tuerca sobre el indiscutible vínculo entre el amor y la muerte [...] (Extracto de la contraportada de mi ejemplar).
Editorial de mi ejemplar: Editorial Planeta Mexicana S. A. de C. V., a través de Diana.

¿Qué les puedo decir? Aunque García Márquez no sea comprendido por todo el mundo, su estilo es de esos que me llega a gustar. Como muchos, del autor conocí primero Cien años de soledad, y después, cuando Diana editó varias de sus novelas en formato práctico y barato, no pude resistirme a adquirir varias de ellas, porque bien mirado, ¿cómo iba a quedarme solo con los Buendía y Macondo? Anteriormente, en este mismo blog, salió seudo-reseña de otro librito, así que no deben tomar tan a la ligera mi propósito de leer un poco más de García Márquez.

En un pueblo costero, la gente se prepara porque por el puerto, va a pasar el obispo. Uno de los habitantes, Santiago Nasar, descendiente de un árabe, se pone sus mejores galas y va rumbo al puerto, deseoso de ver a aquella eminencia religiosa aunque sea de lejos. Sin embargo, no sabe que varias circunstancias se han reunido ese día para causarle la peor desgracia: lo van a matar.

Es increíble los sucesos que se conjuntaron para que se realizara el asesinato de Santiago Nasar, quien pasa a ser un accesorio de su propia historia. Es alguien más quien, a través de sus investigaciones, nos va narrando lo que diversos ojos recuerdan de aquel nefasto día, en que lo más emocionante e impactante sería solamente el ver pasar a un importante miembro del clero en barco. Nuestro narrador, después de varios años, se dio a la tarea de recolectar cuanto testimonio pudiera encontrar sobre lo que llevó a Santiago Nasar a la muerte, incluso hablar con la fuente de sus desgracias. Conforme avanzamos en la historia, en la descripción de aquel día, es inevitable que nos preguntemos qué habría sido de Santiago si esto o aquello hubieran sido de otra manera, pero como en la vida real, el "hubiera" no existe. La muerte se anuncia desde el título, es inevitable, así que lo único que podemos hacer es sumergirnos en lo que lleva a Nasar a dejar de existir.

Para ser una novela corta (sí, para los estándares de Bell, es cortísima), no puedo decir que me aburrió. Creo que precisamente por su tema y su longitud, la disfruté como era debido. Es imposible imaginar algo como eso alargado hasta el infinito, a menos que se tratara de una novela policíaca en la que haya que resolver un misterio, pero no es el caso (y no, no diré por qué). El punto es que para aquellos que quieran leer por primera vez algo de García Márquez, quizá puedan empezar por Crónica de una muerte anunciada. No creo que se arrepientan.

Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.

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