La OSECI presenta... ¡Primera Escena!

Otro apacible día se vive en Agua Imaginaria. Los niños van a la escuela, los adultos al trabajo… Y ciertas chicas vestidas de morado comienzan sus labores.

~En la biblioteca…~

—Veamos… Reunión con el pueblo el día veinticuatro, ¿qué día es hoy? —Bell se acomoda los anteojos con cierta flojera, para luego fijarse en el calendario más cercano —¿Qué, hoy es veinticuatro? ¿Quién demonios puso esta reunión con el pueblo en MI agenda?

~En jardín, bajo unos robles…~

—Ahí va… —suspiró Writer, deteniendo sus anotaciones del día al escuchar el grito de su Líder —Pero yo no le anoté eso, yo llevo la agenda de la OSECI, ¿quién habrá sido?

~En la cocina…~

—¡Demonios, los chocos! Seguro fue esa loca de Joke… —renegó May, al revisar las provisiones de chocolates y notar la ausencia de gran parte de éstas. Acto seguido, distinguió las palabras de Bell —¿Y qué es eso de una reunión con el pueblo? ¡Soy la Alcaldesa y nadie me avisó!

~En la sala de televisión…~

—En serio que no te entiendo, Luna, ¡míralo nada más! —Mery, bordando una falda para un baile regional que presentaría en pocos días, meneó la cabeza —No digo que sea feo, pero…

—¡Vamos, amor, dale! —la Messias ignoró por completo lo que la Diosa Menor de la Danza le comentaba, pues nuevamente estaba viendo un partido del Barça.

De pronto, les llegó el grito de Bell.

—¿Writer no se hace cargo de la agenda? —recordó Luna con vaguedad.

—Sí, pero de la agenda de la OSECI en general. La de Bell es privada —contestó Mery.

—¿Entonces quién le anotó esa reunión?

~En una de las habitaciones de la residencia, cuya puerta ostentaba un letrero que decía Enfermería…~

—Ya tenemos vendas, pociones, antibióticos… No, son antisépticos, los otros no se consiguen sin receta (*). Y muchos hisopos…

Joke agitó su azulada cabeza con alegría, sacó varios hisopos de un frasco y se puso a juguetear con ellos, en lo que entraba la Sublíder Hippie con cara larga.

—Dame algo para la cabeza, Joke, por favor —pidió Veerie en un susurro.

Justo entonces oyeron a Bell, por lo que Veerie hizo una mueca y se tapó los oídos.

—¿A quién se le ocurre meter mano en la agenda de Bell? —refunfuñó la Sublíder.

—Etto… A mí no, ya sabes… A menos que fuera May…

Como la cocina quedaba cerca, escucharon los reclamos de la Encargada de los Chocos.

—Si no fue May, ¿entonces quién? —se preguntaron las dos chicas en voz alta.

~En los jardines, bajo el pino más alto…~

—A ver, muchachos, por aquí —la Diosa Menor de Marzo había convocado nuevamente a un grupo de galanes (que quién sabe de dónde venían) para tomar el té —Pad, por favor, prepara todo, aquí está bien.

Tras Carmen y sus galanes, la pobre Aprendiz cargaba con un mantel a cuadros, un par de canastas de picnic y un par de sombrillas. ¿Cómo era que nada se le había caído? Era un misterio.

Y en ese instante, el estallido de Bell se dejó oír hasta ese sitio.

—¡Vaya, lo había olvidado! —Pad, como pudo, colocó las cosas en el césped y se echó a correr hacia la residencia, dejando plantados a Carmen y sus acompañantes —No le avisé de ese cambio en la agenda, ni tampoco a mi madrina, ¡me matarán!

~En el comedor…~

—¡De verdad lo siento! —se disculpaba Pad una y otra vez, después de haberse echado un auténtico maratón para reunir a todas las SECI’s —Bell dijo que teníamos que reunirnos con el pueblo por estas fechas, para la primera escena del proyecto, así que acomodé algo en la agenda. Como la otra la lleva Writer, no quise meterme y…

—Bueno, ya —Bell alzó una mano, dándose cuenta de dónde había estado el error ahí —May, Pad es tu Ahijada, así que para la próxima, el contacto con el pueblo lo platicarán ustedes dos, ¿entendido?

—¡Fuerte y claro! —May hizo un saludo militar, entre bromista y temerosa, ¡es que si Bell hubiera estado molesta habría sido espantoso!

—A las demás, les encargo unos cuantos trucos, compensaremos al pueblo por el retraso.

—¡Nada de fuegos artificiales, que todavía no me creo eso de que los autoricé! —soltó May.

—Vamos, May, ¿quieres pruebas de eso? —sonrió maliciosamente Carmen, mostrando una pequeña videocámara de última generación.

—Luego vemos eso, ¡manos a la obra! —mandó Bell, con el ceño fruncido.

Y las otras, para evitarse problemas, obedecieron enseguida.

~En la plaza principal de Agua Imaginaria…~

—Ya se tardaron, ¿no? —comentó el dueño del Palacio, cruzado de brazos.

—Cariño, ¿no quieres un caramelo? —inquirió Janni, ofreciéndole un dulce de envoltura brillante a su marido.

—Claro, corazón, ¿de qué sabor es?

—¡Por última vez, Seba, deja de criticarlo todo!

—Baru, mujer, es que esa tienda tenía un letrero que…

—¡A callar, te digo!

—¡Buenas tardes, damas y caballeros! —Bell gritó por todo lo alto, aún con un megáfono en la mano, desde el kiosko de la plaza —Lamento la demora, hubo un par de contratiempos —Pad, en un rincón, seguía muy avergonzada —Bien, para las personas que no se inscribieron al Batido de Dúos y Parejas en el tiempo acordado, les tengo noticias, ¡pueden anotarse todavía! Aunque ya no podrán participar en el Amigo Invisible, lo siento.

Algunos asentimientos apoyaron eso.

—Y bien, ¡aquí lo tienen, señoras y señores! ¡La primera escena a escribir!

Los participantes en el Batido sacaron papel y pluma, atentos a la pancarta que Joke y Pad comenzaron a mostrar por toda la plaza.

~El primero de la pareja 4 le ayuda al segundo de la pareja 1 a declararse~

Y

~El primero del dúo 6 tiene un problema; le pide consejo al segundo del dúo 2~

—Ahora sí, ¡a crear se ha dicho! No tienen que traer algo ahora mismo si no pueden, pero de una vez les advierto: hay que terminarlos todos para el catorce de febrero. Ni un día después. Por favor, que de eso se trata, de pasarnos ese día de manera divertida. La próxima escena saldrá el miércoles o el jueves, no sé cuál de esos días, pero estén al pendiente.

Bell sonrió al ver que no había quejas al respecto y mientras contemplaba cómo Pad y Joke seguían paseándose por la plaza, se acordó que no había notificado a las personas del Amigo Invisible a quién le regalarían. Mientras sus chicas entretenían al pueblo con algunas cosas (y no sabía de dónde habían salido esos ayudantes guapísimos, seguro era cosa de Carmen), se encogió de hombros.

Eso lo haría en el transcurso de la semana.

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(*) En México, por disposición oficial reciente, está prohibido vender antibióticos sin receta médica.

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Ahora sí, damas y caballeros, hemos comenzado. Lean bien lo que les tocó hacer (Bell no tiene ni idea de lo que le tocó, pero cuando se dé cuenta, gritará como posesa), la primera frase es la de parejas y la segunda, la de dúos de amigos.. Así que nos veremos después, y mientras tanto…

¡Un avance del próximo suceso en la apacible (sí, claro) residencia de la OSECI!:

—¿Qué están viendo? —quiso saber la Alcaldesa de Agua Imaginaria, entrando a la sala de televisión.

Las allí reunidas no atinaban a decir palabra. Pad fue bruscamente levantada por Carmen y Mery para que cubriera parte de la pantalla plana, pero Luna había cometido el descuido de no pausar el video y una imagen nada decorosa de la Encargada de los Chocos se dejó ver.

Y lo peor es que la May del video tenía en una mano una botella de vodka con sólo un cuarto de su contenido.