Título: Negro (en el idioma original, Black).
Autor: Ted Dekker.
Sinopsis: Comienza la epopeya... Al final del día, tres millones de personas serán portadoras del virus más mortal de la historia. Noventa millones en un lapso de dos días. Cuatro millones en una semana. No hay vacuna. No hay antivirus. La única esperanza del mundo es Thomas Hunter. (Extracto de la solapa de la portada de mi ejemplar).
Editorial de mi ejemplar: Grupo Nelson.
¿Qué les puedo decir? La primera vez que vi este libro, confieso que no me llamó mucho la atención. Es más, ni siquiera recuerdo dónde lo vi por primera vez. Pero cuando empezaba a querer comprarlo, dejaron de mostrarlo en las librerías. Hasta hace poco volví a verlo, junto con sus secuelas (Rojo, Blanco y Verde) y me los fui comprando, uno por uno, aunque tuviera por delante otros pendientes que no me dejaban leer toda la serie en ese momento.
Bien, pasemos a la historia en sí. El prólogo nos muestra al villano del cuento, un señor que tiene un gran plan para tener el mundo a sus pies con el uso adecuado de un arma biológica. Sin embargo, algo amenaza con echarle los planes a perder. Y ese algo es más bien un alguien: un estadounidense común y corriente que anda diciendo sueños disparatados... o eso es lo que varios creen.
Thomas Hunter es un intento de novelista que, tiempo atrás, se metió con gente que no debía y que lo ha seguido hasta Denver para ajustar cuentas. Lo persiguen, hay una pelea, a Thomas le acaban rozando la cabeza con una bala... y él cae inconsciente, despertando en un sitio completamente diferente, un bosque oscuro, seco, lleno de murciélagos que quieren devorarlo y de los cuales es salvado por una especie de murciélago blanco (una criatura llamada roush). Se desmaya en ese escenario, todo ensangrentado, preguntándose si se va a morir... pero despierta en un contenedor de basura, en Denver, con la herida de bala sangrándole.
A ver, ¿es solo mi impresión o fue un lío monumental lo del párrafo anterior? Pues no, es más o menos la base para todo lo que pasa. En una realidad, el mundo es como lo conocemos; en la otra, parece que nuestro presente es su pasado (todavía no acabo de descifrar eso, pero es la impresión que da la historia). A través de sus sueños en el escenario del bosque negro (el de los murciélagos malos), Thomas se entera de que una vacuna creada por una farmacéutica francesa mutó y mató a casi toda la humanidad. En el escenario de Denver, Thomas le dijo esos datos a su hermana mayor como quien relata un sueño absurdo y luego ambos se enteran que la farmacéutica de verdad sacará una vacuna, la misma que le dijeron a él que mutará y matará a la humanidad. Así pues, ¿qué es sueño y qué es verdad? ¿Por qué es Thomas el que hace esos "viajes"? ¿Podrá hacer algo para que el virus en verdad no mate a millones? Y en la otra realidad, ¿podrá resistirse a regresar al lugar donde todo comenzó, con murciélagos que quieren hacerlo pedazos, aunque sea para comprender qué le está sucediendo? Todo esto amenizado con la presencia de asesinos, una hermana incondicional, una mujer hermosa que se enamora de él y un montón de cosas rarísimas en ambas realidades.
Hubo momentos en que quería dejar de leer el libro, debo reconocerlo, porque me parecía algo "fumado" (o sea, ciertos fragmentos se asemejaban a alucinaciones causadas por marihuana o similares, jajajaja). La sensación era más intensa cuando Thomas andaba en la realidad de los murciélagos, los roushes y gente que tenía la malicia de un niño de tres años; casi cree una que esa es la realidad "soñada" hasta que pasan ciertos detalles que te dejan con la duda (y lo digo muy en serio). Eso y el condenado final cardíaco me hacen querer tener enfrente a Dekker para zarandearlo un poco, antes de tomar mi ejemplar de Rojo y enterarme de cómo continúa semejante disparate.
Para terminar: si quieres una historia con un mínimo de coherencia, en la que no puedas perderte fácilmente y que te resulte más o menos normal... Vete a buscar otro libro. Si quieres algo entretenido, emocionante, ridículo, frustrante y que te ponga a querer descifrar qué pasa en realidad... Puedes darle una oportunidad a Negro. Sinceramente, de Dekker mi novela favorita sigue siendo la primera que leí de él, Tr3s, aunque Negro tiene sus buenos momentos.
Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.
¡Hola!
ResponderEliminarMe topé con sus secuelas (Rojo y Blanco) y pregunte por el primero, ya que había visto tu "Lectura incauta" y me llamó la atención, pero me dijeron "Si hubieras venido ayer a preguntarlo te lo hubiera dado, sólo quedaba uno en bodega y no tenemos conocimiento de cuando llegue stock" quedé aburrida... Realmente me llamaba el nombre y ahora con tu reseña, pues muuuuuuchoooo más... Será esperar :(