Título: Los Reyes Malditos III. Los Venenos de la Corona (en el idioma original, Les Poisons de la couronne).
Autor: Maurice Druon.
Sinopsis: La maldición que el gran maestre de los templarios lanzara a la cara de Felipe el Hermoso parece haberse hecho realidad... Los Venenos de la Corona resucita casi día a día los conflictos, odios, intrigas y crímenes que plagaron el reinado de dieciocho meses de Luis X, quien en pocos meses llevó la obra del Rey de Hierro al borde de la destrucción. En junio de 1316, el rey muere envenenado. [...] (Extracto de la contraportada de mi ejemplar).
Editorial de mi ejemplar: Ediciones B (a través de byblos).
¿Qué les puedo decir? La historia francesa de intrigas, rencores y peleas continúa, damas y caballeros. Esta es la tercera entrega de Los Reyes Malditos, que de verdad parece que les llueve sobre mojado, nadie sabe si porque de verdad están maldito o qué sé yo. De nuevo bendigo la caja que sacaron de la colección, que ahora sacan los ejemplares de forma individual en tapa dura y salen muy caros (Bell rueda los ojos). Bueno, ya, a lo que interesa.
Nos ubicamos después de los sucesos narrados en La Reina Estrangulada, cuando Luis, primer hijo de Felipe IV el Hermoso, es rey de Francia y está por tomar segunda esposa. Ha elegido a una pariente lejana, Clemencia de Hungría, que será escoltada especialmente desde Nápoles, donde vive, a Francia, para la boda. Por otro lado, el nuevo rey, a quien apodan el Obstinado, lleva al reino de un lado para otro, a punto de destruir los avances que su padre consiguió con no pocos esfuerzos, debido a que se deja influenciar fácilmente. Así las cosas, ¿acaso este rey estará a salvo de las conspiraciones en su contra, viendo las decisiones que toma porque otros lo aconsejan según sus propios intereses?
No es difícil imaginarse, por la sinopsis y por lo que hace y dice Luis X a lo largo de la novela, el por qué lo envenenan. Lo que nos intriga es cómo lo hacen, a la vez que algunos otros personajes a su alrededor, aparentemente secundarios, viven ciertas aventuras que terminarán afectando a la familia real. Así las cosas, ¿de verdad estarán malditos los descendientes de Felipe el Hermoso? ¿Qué pasará con el trono de Francia tras la muerte de Luis el Obstinado? ¿Acaso nadie está a salvo de lo que la ambición y la maldad estén planeando para satisfacer a sus creadores? Eso solo el tiempo lo dirá.
Mientras tanto, veamos qué otros conflictos van a resolverse en la corte francesa, considerando que el rey muere sin dejar heredero varón vivo (debido a que al morir, deja embarazada a Clemencia de Hungría, pero obviamente, nadie sabe si el bebé será niño o niña). Igualmente, no hay que esperar cosas más alegres, debido al título del siguiente libro, que para varias mujeres de la actualidad, seguro les parecerá una frase absurda: La Ley de los Varones.
Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario