Portada de mi epub, ya saben. Y me gusta, será por la Llave (?) |
Autor: Catherine Fisher.
Formato: Digital.
Sinopsis: Incarceron es muy distinta de las demás cárceles: sus presos no solo viven en celdas, sino también en bosques metálicos, ciudades arrasadas y parajes sin fin. La cárcel lleva siglos sellada y únicamente un hombre, según cuenta la leyenda, ha conseguido escapar. Finn, un preso de diecisiete años, está decidido a huir, aunque la mayoría de los reclusos ni siquiera creen que el Exterior exista. Pero lo que ellos no saben es que Finn se ha apoderado de una especie de llave de cristal y, a través de ella, puede comunicarse con Claudia, quien asegura vivir en el Exterior y que su padre es el Guardián de Incarceron. Sin embargo, ninguno de los dos es consciente de que la cárcel esconde mucho más de lo que ven sus ojos. [...] (Extracto de la introducción).
¿Qué les puedo decir? Esta novelita me llevó mucho más tiempo del que creí. Ahora comprendo a aquellos que se quejaban de su extensión, pero creí que era solamente por su grosor físico, pero por lo visto, el montón de páginas que abarca en electrónico también es considerable. Vamos, incluso quise arrojar bien lejos a Tarly, con lo que la quiero... (Bell rueda los ojos y mira a su tableta con cariño). Bueno, pasemos a lo que vinieron a leer, si no les importa.
Lo primero que leemos es a un chico en el suelo, encadenado, esperando. Un grupo de personas en vehículos se acerca a él a toda velocidad, y el chico ruega porque se detengan antes de que lo aplasten, cosa que termina sucediendo. Pero en cierto momento, el chico encadenado pasa a ser una señal en cuanto se le libera y los que venían en convoy son asaltados.
Ese es el día a día del grupo al que pertenece Finn, un muchacho que no recuerda nada de su vida antes de abrir los ojos en una de las tantas celdas de Incarceron, un sitio donde se supone que fue a parar lo peor de la humanidad. Es un lugar que, lejos de ser solo muros y rejas, cuenta con más paisajes de los imaginados, la gente se ha dividido en "clases" y cada una hace lo que considera necesario para sobrevivir. Finn, por azares del destino, se ha unido a una especie de banda de ladrones, pero sabe, en lo más profundo de su ser, que no pertenece allí.
Por otro lado, el mundo que conocemos parece haber sufrido algo llamado "años de la Ira", luego de los cuales, por decreto de un rey, la gente se aferró al Protocolo: eligieron una época de la historia para recrearla y vivir conforme a ella, por siempre, ignorando lo que obviamente no pertenecía a ese periodo en particular. En ese ambiente vive Claudia, hija del llamado Guardián de Incarceron, un personaje realmente importante en este nuevo orden. Estaba comprometida, cuando era pequeña, con el príncipe heredero de ese reino en el que se ha convertido su entorno, pero éste murió y ahora debe casarse con el hermanastro del príncipe, hijo de la actual reina. Solo que ella no está muy puesta con esa labor porque, por alguna razón, sospecha que el príncipe con el que la comprometieron sigue vivo, en alguna parte.
Dos mundos que parecen muy lejanos. Finn, como cualquiera que se sabe preso, desea escapar de Incarceron, ir hacia el llamado Exterior, descubrir si de verdad nació en aquellas celdas o, por el contrario, lo encerraron allí. Por su parte, Claudia no quiere casarse ni seguir siendo el peón de su padre, el Guardián que está en muy buena posición ante la reina, ¿pero qué puede hacer para evitarlo?
Empecé a preguntarme dónde estaba Incarceron casi de inmediato, para qué finjo demencia. Un sitio como el descrito en el libro, con un montón de escenarios, no parecía algo que pudiera existir en el mundo conocido. La gente allí está resignada a pasar los días sin saber lo que son de verdad el día, la noche, el sol, la luna y las estrellas; peor aún, saben que Incarceron está "viva" y que cualquier cosa en ella se reutiliza para que siga funcionando. Cualquier cosa. Así pues, ¿qué es Incarceron exactamente? ¿Dónde está? ¿Cómo es que existe una leyenda sobre que un hombre, uno solo, logró evadir esa prisión y salir al Exterior?
Y en el mundo gobernado por el Protocolo, que ha elegido un siglo tan pasado que no tienen libre uso de televisores, autos o aviones, ¿logrará Claudia probar sus teorías y no casarse? ¿Qué le espera cuando decida inmiscuirse en los secretos del Guardián de Incarceron?
Advertidos quedan de que es un libro largo. Pero largo con ganas. Hay partes en las cuales deseaba que se terminara pronto, me aburría un montón, pero luego regresaba la emoción, la intriga, y quería seguir leyendo para saber más. Así, cuando pensaba que todavía faltaba muuuucho para acabarlo, el epub llegó a su fin y me quedé con una cara medio rara (no le pregunten a ciertos colegas de Bell que presenciaron el hecho, seguro pensaron que se volvía más loca, la pobre) y la sensación de que Fisher es una condenada embustera que solo dejó las cosas así para que la gente se lanzara enseguida por Sáfico, la siguiente parte (cosa que yo haré, por cierto).
Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.
Ese es el día a día del grupo al que pertenece Finn, un muchacho que no recuerda nada de su vida antes de abrir los ojos en una de las tantas celdas de Incarceron, un sitio donde se supone que fue a parar lo peor de la humanidad. Es un lugar que, lejos de ser solo muros y rejas, cuenta con más paisajes de los imaginados, la gente se ha dividido en "clases" y cada una hace lo que considera necesario para sobrevivir. Finn, por azares del destino, se ha unido a una especie de banda de ladrones, pero sabe, en lo más profundo de su ser, que no pertenece allí.
Por otro lado, el mundo que conocemos parece haber sufrido algo llamado "años de la Ira", luego de los cuales, por decreto de un rey, la gente se aferró al Protocolo: eligieron una época de la historia para recrearla y vivir conforme a ella, por siempre, ignorando lo que obviamente no pertenecía a ese periodo en particular. En ese ambiente vive Claudia, hija del llamado Guardián de Incarceron, un personaje realmente importante en este nuevo orden. Estaba comprometida, cuando era pequeña, con el príncipe heredero de ese reino en el que se ha convertido su entorno, pero éste murió y ahora debe casarse con el hermanastro del príncipe, hijo de la actual reina. Solo que ella no está muy puesta con esa labor porque, por alguna razón, sospecha que el príncipe con el que la comprometieron sigue vivo, en alguna parte.
Dos mundos que parecen muy lejanos. Finn, como cualquiera que se sabe preso, desea escapar de Incarceron, ir hacia el llamado Exterior, descubrir si de verdad nació en aquellas celdas o, por el contrario, lo encerraron allí. Por su parte, Claudia no quiere casarse ni seguir siendo el peón de su padre, el Guardián que está en muy buena posición ante la reina, ¿pero qué puede hacer para evitarlo?
Empecé a preguntarme dónde estaba Incarceron casi de inmediato, para qué finjo demencia. Un sitio como el descrito en el libro, con un montón de escenarios, no parecía algo que pudiera existir en el mundo conocido. La gente allí está resignada a pasar los días sin saber lo que son de verdad el día, la noche, el sol, la luna y las estrellas; peor aún, saben que Incarceron está "viva" y que cualquier cosa en ella se reutiliza para que siga funcionando. Cualquier cosa. Así pues, ¿qué es Incarceron exactamente? ¿Dónde está? ¿Cómo es que existe una leyenda sobre que un hombre, uno solo, logró evadir esa prisión y salir al Exterior?
Y en el mundo gobernado por el Protocolo, que ha elegido un siglo tan pasado que no tienen libre uso de televisores, autos o aviones, ¿logrará Claudia probar sus teorías y no casarse? ¿Qué le espera cuando decida inmiscuirse en los secretos del Guardián de Incarceron?
Advertidos quedan de que es un libro largo. Pero largo con ganas. Hay partes en las cuales deseaba que se terminara pronto, me aburría un montón, pero luego regresaba la emoción, la intriga, y quería seguir leyendo para saber más. Así, cuando pensaba que todavía faltaba muuuucho para acabarlo, el epub llegó a su fin y me quedé con una cara medio rara (no le pregunten a ciertos colegas de Bell que presenciaron el hecho, seguro pensaron que se volvía más loca, la pobre) y la sensación de que Fisher es una condenada embustera que solo dejó las cosas así para que la gente se lanzara enseguida por Sáfico, la siguiente parte (cosa que yo haré, por cierto).
Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.
¡Lo encontré en la librería! Llevaba años buscándolo y por fin lo encontré, próximamente estará en mi estantería =3... Pero ya, en serio, lo que haz dicho de largo con ganas me ha recordado a "El pasaje", un tocho largo en todo el sentido de la palabra que también tiene sus partes lentas y aburridas, que más que hacerme odiarlo me hacen apreciarlo, es un libro que tiene de todo.
ResponderEliminarMe intriga mucho la historia de Incarceron, no sé muy bien por qué esta "viva" y de verdad quiero conocer la historia. Tu reseña sólo ha hecho que aumenten mis ganas por leerla.
Por cierto, soy Lunática, he vinculado mi perfil con Google+ entonces se ha modificado el nick ;)
¡Besos!